• Adrian Guggemos

    "Daba vueltas y más vueltas al jardín con ella durante horas y horas, yendo cada vez más rápido y marcando una pista de tierra en el césped."

    Todo empezó para mí en una pequeña bicicleta, cuando sólo tenía unos cuatro años. Daba vueltas y más vueltas al jardín con ella durante horas y horas, yendo cada vez más rápido y marcando una pista de tierra en el césped. A los seis años, mi vuelta por el jardín ya incluía algunos escalones para bajar, y también había construido saltos para volar un poco, ¡lo que me llevó a romper el cuadro de mi bicicleta! Aquella pobre bicicleta recibió una soberana paliza.

    Cuando tenía siete años, en 2001, tenía una bicicleta nueva y mi padre y yo nos pasamos por el Moto Club de Trial del pueblo (MSC Schorndorf) para echar un vistazo. Ese mismo día aprendí a conducir una moto de trial, ya que celebraban una jornada de puertas abiertas. ¡Allí mismo vi que el trial era lo mío!

    El trial es la base de todo deporte de dos ruedas. Es realmente complejo y versátil. A día de hoy, no importa qué moto lleve, siempre siento que tengo el control y sé cómo reaccionar, gracias a mi experiencia en el trial.

    Un arranque competitivo

    En 2002, participé en mi primera competición de trial, acabando tercero. Ese año incluso conseguí acabar tercero en el campeonato, fue un gran comienzo. A partir de ahí seguí participando en competiciones de trial y en 2006 pasé a la categoría de 125 cc con una GASGAS TXT 125 Pro. ¡Mi primera GASGAS!

    Tenía un nuevo enfoque del trial, no sólo el típico trial clásico de "vieja escuela". Siempre he sido diferente y me he enfrentado a los triales de forma distinta a los demás. En su día, tuve muchos detractores, y al principio nadie lo entendía igual que yo. Pero esto no me desanimó y nunca dejé de hacerlo porque esa era mi forma de actuar. Era lo que me gustaba hacer. Me apasionaba hacerlo de forma diferente. En el fondo, sabía que hacía lo correcto.

    Cuando no competía en trial, pasaba horas al manillar de mi MTB. La fusión de habilidades entre el trial y el mountain bike y viceversa, me ayudó mucho en mi progresión.

    El punto de inflexión

    Seguí compitiendo en trial hasta los 16 años, pero para mí siempre hubo algo más que las zonas. Siempre buscaba los saltos y me gustaba entretener a la gente con caballitos y otras acrobacias. Creo que la mayoría de la gente pensaba que una moto de trial no era capaz de saltar una rampa tipo freestyle, o que se pudieran hacer grandes gaps o derrapajes con ella. ¡Pero sí que era posible! Practiqué primero un montón de trucos nuevos en mi MTB. Son mucho más ligeras y mucho más seguras para aprender. Dominaba los trucos en mi MTB, y luego los ponía en práctica en mi moto de trial, especialmente los trucos en terreno llano.

    Fue entonces cuando empezamos a filmar lo que estaba haciendo, que comenzó con el salto de una gran meseta de motocross. Esto fue en 2007. A partir de ahí, empezamos a filmar prácticamente cada vez que salía a probar cosas y a hacer pequeños montajes. En realidad ya no competía, sino que se trataba de hacer vídeos. Conseguí una gran cantidad de seguidores, lo que creo que ayudó al trial en general.

    Era muy divertido montar los vídeos y en 2010 me invitaron al evento Red Bull Woodstrokes organizado por Julien Dupont. Este fue el primer evento de trial freestyle del mundo, con una locura de recorrido con enormes wallrides y grandes rampas para saltar. Era algo así como una pista de motocross freestyle con características técnicas de trial incluidas.

    "El trial es la base de todo deporte de dos ruedas. Es realmente complejo y versátil. A día de hoy, no importa qué moto lleve, siempre siento que tengo el control y sé cómo reaccionar, gracias a mi experiencia en el trial."

    Llevando el show de gira

    Me encontré en mi elemento en el Woodstrokes, ¡vi que esto era lo que quería hacer con mi vida! Decidí dejar de participar por completo en competiciones de trial tradicionales y empecé a participar en espectáculos de trial freestyle por toda Europa. Después de un tiempo empecé a construir mis propias rampas y creé mi propio espectáculo para poder actuar por mi cuenta, viajar a donde quisiera, y empecé a llevarlo como una forma de ganarme la vida.

    Mis espectáculos consisten en tres deportes diferentes mezclados para crear un espectáculo emocionante. Tengo los obstáculos de trial "clásicos" con pasos y secciones técnicas. Luego hago muchos trucos a pie plano típicos del stunt riding y finalmente están las rampas para hacer acrobacias y backflips como los chicos del freestyle. He llevado mi espectáculo por toda Europa y he actuado regularmente en grandes eventos como MotoGP™, F1, DTM y torneos de fútbol. Mi presencia en estos eventos ha realmente contribuido a hacer crecer mis canales de redes sociales.

    "¡Las motos de trial de GASGAS han sido siempre ideales!"

    Siguiendo la progresión

    En 2016 me invitaron a participar como doble de acción para Marvel en su gira europea de espectáculos de acción en vivo durante seis meses, lo que fue increíble. Poco después, hice mi primer vídeo viral, que supuso un gran paso adelante para mí. Fue el primer vídeo de Moto Trust Game que filmamos. Es curioso porque estábamos grabando otro vídeo y teníamos algo de tiempo libre, así que se me ocurrió que podía hacer algunos trucos y mostrar mis habilidades integrando en ellos a mi valiente novia Anni.

    Filmamos el clip en 10 minutos, lo monté y lo subí sin pensar que sería diferente al resto de contenidos que había hecho, ¡pero se convirtió en súper viral! Como si todo el mundo lo viera. Un sinfín de grandes canales volvieron a publicar el vídeo, ni siquiera pude seguir la pista de hasta dónde llegó, pero obtuvo más de 100 millones de visitas en total, ¡al menos esas fueron las que me etiquetaron!

    Fui invitado con mi novia a participar en "Germany's Got Talent" en 2017, lo que también nos dio un buen impulso de seguidores. El vídeo llegó a más de 60 millones de usuarios tan sólo en mi publicación de Facebook. Fue una locura. A finales de 2017 me convertí en piloto de Red Bull, lo cual fue increíble. Desde entonces, ¡todo ha sido una salvaje aventura!

    Y ahora...

    Ser embajador de la marca GASGAS es muy importante para mí y la gama de motos que tengo a mi disposición es increíble. Motos de motocross, enduro, eMTB y por supuesto, de trial, ¡perfecto para un niño grande como yo! ¡Las motos de trial de GASGAS han sido siempre ideales! Ninguna otra moto puede darme la comodidad y la confianza que necesito para hacer mis trucos. La TXT GP es simplemente la mejor moto para mí, no hay nada que se le acerque. Es la moto perfecta para todo y es la que elijo para hacer mis espectáculos de trial acrobático.

    Afortunadamente, ahora tengo unas cuantas motos diferentes para elegir, y esta variedad me da mucha alegría. Estoy repartiendo mi tiempo con todas las motos y por el momento paso la mayor parte de mi tiempo en mi EC 300 y la MC 450F, probablemente porque son nuevas para mí y me estoy divirtiendo mucho con ellas.

    También ha sido genial poder volver a mis raíces montando las Trail Cross 7.0 y Enduro Cross 11.0. Ambas son súper divertidas de llevar, pero también son una gran herramienta para mantenerme en forma física y a la vez pulir también mis habilidades. Pero también hay momentos en los que me paso casi todo el día al manillar de mi TXT GP. A día de hoy sigo disfrutando en la áreas de trial clásico y combinando algunas bonitas líneas técnicas de rueda trasera sólo para que no decaiga la diversión.

    Es genial formar parte de la marca GASGAS. Mi primera moto de trial fue una GASGAS TXT 125 Pro, allá por 2006. 15 años después, ¡sigo montando en motos GASGAS!

    ¡De cara al futuro, tengo claro que un viaje a Estados Unidos entra definitivamente en mis planes! Tengo algunos buenos proyectos de vídeo en preparación para allí, pero hasta que eso ocurra mi plan es montar lo más posible y seguir creando contenido aquí en Europa. Poder montar con los amigos y pasármelo bien es lo que me da vida. No importa si se trata de trial, motocross, enduro, o de buscar nuevas trazadas o hacer grandes saltos en el bike park con mi eMTB. Salir ahí fuera, desafiarnos unos a otros, dar gas y subir de nivel, eso es lo más divertido para mí.

    "Salir ahí fuera, desafiarnos unos a otros, dar gas y subir de nivel, eso es lo más divertido para mí."